“Tarta Helada de Fresa y Chocolate Blanco: Un Postre Refrescante que se Deshace en la Boca”

Ingredientes

• 120 gramos de chocolate blanco
• 1,2 kg de frambuesas o fresas
• 1 taza de crema para batir
• 2 cucharadas de azúcar (opcional, dependiendo del dulzor de la fruta)
• 1 cucharadita de esencia de vainilla
• Galletas Digestive o galletas María para la base (aproximadamente 200 gramos)
• Mantequilla derretida (unos 100 gramos)

Modo de preparación

1. Preparar la base:
   Tritura las galletas en un procesador de alimentos o con un rodillo hasta que queden bien desmenuzadas. Mezcla las galletas trituradas con la mantequilla derretida hasta que se forme una masa compacta. Coloca la mezcla en el fondo de un molde de tarta, presionando bien para que quede bien compacta. Refrigera durante unos 15 minutos para que la base tome consistencia.
2. Hacer la capa de fresa:
   Lava bien las fresas (o frambuesas) y quita los tallos si las usas fresas. Reserva algunas fresas enteras para decorar. Tritura el resto de las fresas con una batidora o procesador de alimentos hasta obtener un puré. Puedes agregar el azúcar y la esencia de vainilla para darle más dulzura y sabor, dependiendo de la acidez de las frutas.
3. Preparar el chocolate blanco:
   En un recipiente apto para microondas o en una cazuela a fuego muy bajo, derrite el chocolate blanco. Una vez derretido, añádelo al puré de fresa y mezcla bien.
4. Montar la tarta:
   Batir la crema para montar hasta que quede firme. Incorporarla delicadamente a la mezcla de chocolate blanco y fresas, asegurándote de que quede bien homogénea.
5. Formar las capas:
   Vierte la mezcla de fresa y chocolate sobre la base de galleta refrigerada. Extiende bien para que quede nivelada. Regresa el molde al refrigerador y deja reposar por al menos 4 horas o hasta que esté bien firme.
6. Servir y decorar:
   Una vez que la tarta haya adquirido la consistencia deseada, desmóldala con cuidado y decórala con las fresas enteras que reservaste antes. Si deseas, puedes añadir también un poco de chocolate blanco rallado por encima para un toque extra.

Consejos para servir y almacenar

• Servir:
  Esta tarta helada es ideal para disfrutarla bien fría, especialmente en verano. Acompáñala con una infusión fría o incluso una bola de helado para aumentar su frescura. Si quieres un toque crujiente, puedes añadir algunas nueces o almendras picadas en la decoración.
• Almacenamiento:
  Puedes conservarla en el refrigerador hasta por 3 días. Si no la vas a comer inmediatamente, asegúrate de cubrirla bien para evitar que se reseque.

Variantes

• Tarta de frambuesa:
  Puedes reemplazar las fresas por frambuesas, lo que le dará un sabor más ácido pero igualmente delicioso. También puedes combinar ambas frutas para una mezcla de sabores interesante.
• Base de chocolate:
  Si prefieres una base más chocolatera, utiliza galletas de chocolate o incluso una base de brownie en lugar de galletas digestivas.
• Añadir un toque de licor:
  Para un toque diferente, puedes añadir un chorrito de licor de frambuesa o licor de crema en la mezcla de fresa y chocolate blanco para darle un sabor más sofisticado.

FAQ

1. ¿Puedo hacer esta tarta con otros tipos de chocolate?
Sí, si prefieres chocolate negro o chocolate con leche, puedes hacer las adaptaciones, pero el chocolate blanco le da un toque cremoso y suave que combina perfectamente con las fresas.

2. ¿Cómo saber cuándo está lista la tarta?
La tarta estará lista cuando esté completamente firme. Puedes comprobarlo tocando ligeramente el centro con el dedo; si no se hunde, está lista.

3. ¿Se puede hacer con otras frutas?
¡Claro! Puedes experimentar con otras frutas como mango, durazno o incluso una mezcla de frutos rojos para darle tu toque personal.