- 2 tazas de brócoli fresco, cortado en floretes
- 1 cucharada de mantequilla
- 1 cebolla pequeña, picada
- 2 dientes de ajo, picados
- 4 tazas de caldo de pollo o vegetal
- 1 taza de leche entera
- 1 taza de queso cheddar rallado (preferiblemente maduro)
- 2 cucharadas de harina
- Sal y pimienta al gusto
- 1/4 cucharadita de nuez moscada (opcional)
Modo de preparación:
- Preparar el brócoli:
Cocina los floretes de brócoli en agua hirviendo con sal durante unos 5 minutos o hasta que estén tiernos pero aún firmes. Luego, escúrrelos y resérvalos. - Sofrito de cebolla y ajo:
En una olla grande, derrite la mantequilla a fuego medio. Añade la cebolla picada y sofríela durante unos 3 minutos o hasta que esté dorada. Agrega el ajo picado y cocina durante 1 minuto más. - Hacer el roux (base cremosa):
Agrega las 2 cucharadas de harina a la olla y mezcla bien con la cebolla y el ajo. Cocina por 2 minutos para que la harina se cocine ligeramente, removiendo constantemente. - Añadir líquidos:
Vierte lentamente el caldo de pollo (o vegetal) y la leche, mientras sigues removiendo para evitar que se formen grumos. Lleva la mezcla a ebullición y luego reduce el fuego. Cocina por unos 5-10 minutos, hasta que la sopa espese. - Agregar el queso y el brócoli:
Incorpora el queso cheddar rallado a la sopa y mezcla hasta que se derrita por completo. Añade el brócoli reservado y cocina durante unos minutos más hasta que esté bien integrado y caliente. - Sazonar:
Agrega sal, pimienta y una pizca de nuez moscada al gusto. Si deseas una sopa más cremosa, puedes usar una batidora de inmersión para triturar una parte de la sopa y darle una textura aún más suave. - Servir:
Sirve la sopa caliente en tazones y acompáñala con trozos de pan crujiente o una rodaja de pan de ajo para una experiencia completa.
Consejos para servir y almacenar:
- Servir: Esta sopa es perfecta acompañada con pan crujiente, galletas saladas o incluso unos croutones caseros. Puedes agregar un toque de crema de leche o más queso rallado por encima antes de servir para hacerla aún más decadente.
- Almacenaje: Guarda las sobras en un recipiente hermético en el refrigerador por hasta 3 días. Para recalentar, simplemente calienta la sopa a fuego bajo en una cacerola. Si es necesario, ajusta la consistencia con un poco de leche.
Variantes:
- Versión vegana: Si prefieres una versión vegana, puedes sustituir el queso cheddar por queso vegano y la leche por leche de almendra o coco. El caldo también puede ser completamente vegetal.
- Añadir tocino: Si te gustan los toques salados, puedes agregar trozos de tocino crujiente a la sopa para darle un sabor extra delicioso.
Preguntas frecuentes (FAQ):
¿Se puede hacer esta sopa más espesa?
Sí, puedes triturar más brócoli o incluso añadir una pequeña cantidad de puré de patata o crema espesa para darle mayor cuerpo.
¿Puedo hacer la sopa con brócoli congelado?
Sí, puedes usar brócoli congelado. Solo asegúrate de descongelarlo y escurrir el exceso de agua antes de incorporarlo a la sopa.
¿Puedo agregar otros ingredientes?
¡Claro! Puedes personalizar la sopa añadiendo zanahorias ralladas, espinacas frescas o incluso un poco de chile para darle un toque picante.
Esta receta de sopa de brócoli y queso cheddar es un abrazo reconfortante en forma líquida, ideal para disfrutar en cualquier momento del año. ¡Seguro que se convertirá en una de tus sopas favoritas!
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