Mermelada de fresa casera: el dulce perfecto para tu desayuno

Método de preparación

1. Preparar las fresas: Lávalas cuidadosamente, retira los tallos y córtalas en trozos pequeños.
2. Cocción inicial: Coloca las fresas en una olla grande junto con el azúcar y el zumo de limón. Remueve suavemente para mezclar.
3. Reposa la mezcla: Deja reposar durante una hora para que las fresas suelten su jugo.
4. Cocinar la mermelada: Calienta la mezcla a fuego medio, removiendo constantemente. Una vez que comience a hervir, reduce a fuego lento y sigue cocinando por 20-30 minutos.
5. Verificar la textura: Para asegurarte de que la mermelada está lista, coloca una pequeña cantidad en un plato frío; si se solidifica ligeramente al enfriarse, está lista.
6. Envasar: Vierte la mermelada caliente en frascos esterilizados, sella inmediatamente y déjalos enfriar a temperatura ambiente.

Consejos de almacenamiento y servicio

• Almacenamiento: Guarda los frascos cerrados en un lugar fresco y oscuro. Una vez abiertos, consérvalos en el refrigerador y consúmelos dentro de un mes.
• Servicio: Úsala para acompañar tostadas, yogur natural o como relleno para panqueques y pasteles.

Variantes

• Con menos azúcar: Reduce la cantidad de azúcar a la mitad y agrega un poco de pectina para espesar.
• Con otros sabores: Incorpora una pizca de canela o un chorrito de licor (como Grand Marnier) al final de la cocción para un toque especial.
• Textura suave o grumosa: Si prefieres una mermelada sin trozos, tritura las fresas antes de cocinarlas.

FAQ

¿Puedo usar fresas congeladas?
Sí, pero descongélalas completamente antes de usarlas y escúrrelas ligeramente para evitar exceso de líquido.

¿Cómo esterilizo los frascos?
Lávalos bien y colócalos en agua hirviendo por 10 minutos. También puedes hornearlos a 120°C durante 15 minutos.

¿La mermelada necesita conservantes adicionales?
No, el azúcar actúa como conservante natural. Sin embargo, es importante que los frascos estén completamente sellados para evitar que se estropee