Malvaviscos caseros rosas: una delicia suave y esponjosa

1 taza (240 ml) de agua fría, dividida en dos partes

3 sobres (21 g en total) de gelatina sin sabor

2 tazas (400 g) de azúcar

1/2 taza (120 ml) de jarabe de maíz o glucosa

1/4 cucharadita de sal

1 cucharadita de extracto de vainilla

Colorante alimentario rosa (unas gotas, al gusto)

Azúcar glas y fécula de maíz para espolvorear (aproximadamente 1/2 taza de cada uno)

Preparación:

1. Prepara el molde:

Engrasa un molde rectangular y espolvoréalo con una mezcla de azúcar glas y fécula de maíz. Esto evitará que los malvaviscos se peguen.

2. Hidrata la gelatina:

En un bol, mezcla 1/2 taza de agua fría con la gelatina. Deja reposar para que se hidrate.

3. Prepara el jarabe:

En una cacerola, combina el azúcar, el jarabe de maíz, la sal y la otra 1/2 taza de agua.

Calienta a fuego medio, revolviendo hasta que el azúcar se disuelva.

Luego, sube el fuego y cocina sin revolver hasta que alcance los 115 °C (240 °F) o el punto de bola blanda.

4. Combina el jarabe con la gelatina:

Vierte lentamente el jarabe caliente sobre la gelatina hidratada mientras bates con una batidora eléctrica a velocidad baja.

Aumenta la velocidad y bate durante 10-12 minutos hasta que la mezcla esté blanca, esponjosa y triplique su tamaño.

5. Añade el color y el sabor:

Incorpora el extracto de vainilla y unas gotas de colorante rosa. Mezcla hasta que el color sea uniforme.

6. Vierte en el molde:

Extiende la mezcla en el molde preparado y alísala con una espátula engrasada.

Espolvorea más mezcla de azúcar glas y fécula de maíz por encima.

7. Deja reposar:

Deja que los malvaviscos reposen a temperatura ambiente durante al menos 6 horas o toda la noche.

8. Corta y sirve:

Desmolda los malvaviscos y córtalos en cubos con un cuchillo engrasado o tijeras.

Espolvorea los lados con la mezcla de azúcar glas y fécula de maíz para que no se peguen.

Consejos para servir y almacenar:

Guarda los malvaviscos en un recipiente hermético a temperatura ambiente por hasta 2 semanas.

No los refrigères, ya que podrían perder su textura esponjosa.

Variantes:

Sustituye el extracto de vainilla por esencia de fresa, frambuesa o coco para darle un sabor diferente.

Usa otros colores para adaptarlos a distintas ocasiones, como azul, verde o amarillo.

Añade chispas de chocolate o coco rallado antes de que se endurezcan para un toque extra.

FAQ:

1. ¿Puedo usar gelatina con sabor?

Sí, pero la textura y el color podrían variar ligeramente.

2. ¿Es posible hacerlos sin jarabe de maíz?

Puedes sustituirlo por miel o glucosa líquida, aunque el sabor será diferente.

3. ¿Por qué mis malvaviscos están pegajosos?

Es posible que no hayas usado suficiente azúcar glas y fécula para espolvorear. Añade más para evitar que se peguen.

4. ¿Puedo congelar los malvaviscos?

No se recomienda, ya que la textura puede cambiar al descongelarlos.