Delicioso Pastel de Queso Casero: La receta perfecta para sorprender a tus invitados

Método de preparación:
Preparar la base de galleta:

Tritura las galletas en un procesador de alimentos hasta obtener un polvo fino. Si no tienes procesador, puedes colocar las galletas en una bolsa y triturarlas con un rodillo.
Mezcla las galletas trituradas con la mantequilla derretida hasta que obtengas una masa homogénea.
Presiona esta mezcla en el fondo de un molde desmontable (aproximadamente de 24 cm de diámetro) para formar una base firme. Deja el molde en el refrigerador durante 10-15 minutos para que se endurezca.
Preparar el relleno de queso:

Bate el queso crema con el azúcar en un bol grande hasta que esté suave y sin grumos.
Añade los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición.
Incorpora la nata líquida, la esencia de vainilla y la ralladura de limón (si decides usarla). Bate hasta obtener una mezcla suave y cremosa.
Hornear el pastel:

Precalienta el horno a 160°C (325°F).
Vierte la mezcla de queso sobre la base de galleta que preparaste anteriormente.
Hornea el pastel durante 50-60 minutos o hasta que el centro esté casi firme pero aún ligeramente tembloroso. Si prefieres una textura más suave, no lo hornees completamente.
Apaga el horno y deja el pastel dentro durante 1 hora para que se enfríe gradualmente. Luego, retíralo y deja enfriar a temperatura ambiente antes de refrigerarlo.
Refrigerar:

Deja el pastel en el refrigerador por al menos 4 horas, o preferiblemente toda la noche, para que adquiera la textura firme y cremosa que caracteriza a un buen pastel de queso.
Servir:

Antes de servir, puedes decorar el pastel con mermelada de frutos rojos, fresas frescas o un poco de nata montada para darle un toque especial.