Delicias rápidas que encantarán a los niños

1 taza de harina.

1/2 taza de leche.

1 huevo.

2 cucharadas de azúcar.

1 pizca de sal.

1 cucharadita de levadura en polvo.

Aceite para freír.

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Sugerencias de preparación paso a paso

1. Preparar la mezcla:

En un bol, bate el huevo con el azúcar hasta obtener una mezcla homogénea.

Agrega la leche y mezcla bien.

Incorpora la harina tamizada junto con la levadura y la sal. Mezcla hasta obtener una masa suave y sin grumos.

2. Freír los bocadillos:

Calienta suficiente aceite en una sartén a fuego medio.

Con ayuda de una cuchara, vierte porciones de la masa en el aceite caliente.

Fríe hasta que estén dorados por ambos lados.

3. Retirar el exceso de aceite:

Coloca los bocadillos en un plato con papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.

4. Servir:

Espolvorea azúcar glas o acompaña con tu sirope favorito.

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Consejos para servir y conservar

Sirve los bocadillos calientes para disfrutar de su textura crujiente por fuera y suave por dentro.

Consérvalos en un recipiente hermético a temperatura ambiente por hasta 2 días.

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Variantes

Con chocolate: Añade chispas de chocolate a la masa antes de freír.

Frutales: Incorpora trozos pequeños de manzana o plátano a la mezcla.

Salados: Omite el azúcar y añade queso rallado o especias como orégano.

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FAQ

¿Puedo hornearlos en lugar de freírlos?

Sí, colócalos en una bandeja engrasada y hornéalos a 180 °C por 15-20 minutos.

¿Qué hacer si la masa está muy líquida?

Agrega más harina, una cucharada a la vez, hasta obtener la consistencia deseada.

¿Son aptos para congelar?

Sí, puedes congelarlos una vez fritos y recalentarlos en el horno antes de servir.

¡Disfruta de estos bocadillos que a los niños les encantarán y te pedirán repetir!